La empresa sueca Pophouse Entertainment, conocida por los aclamados conciertos de ABBA Voyage, se encuentra en conversaciones con Sony Music y Authentic Brands Group (ABG) para explorar la posibilidad de crear espectáculos con un avatar digital de Elvis. Esta oportunidad, despierta una gran expectativa y supone nuevas posibilidades de monetización a través de la gestión de derechos. En este artículo, explicaremos este fenómeno y la compleja red de derechos de propiedad intelectual involucrada.
Un holograma es una representación tridimensional creada a través de la interferencia de rayos de luz provenientes de un láser. Esta tecnología permite que se proyecte una imagen en 3D que puede ser vista desde diferentes ángulos, dando la ilusión de que el objeto o persona representado está realmente presente. En el caso de espectáculos en vivo, los hologramas permiten "resucitar" a artistas fallecidos, creando experiencias inmersivas y nostálgicas para el público.
La idea de los conciertos de holograma no es nueva. En los últimos años, hemos sido testigos de la aparición de diversos espectáculos protagonizados por artistas fallecidos, como el famoso "Tupac Hologram" en el festival Coachella de 2012. Más recientemente, el éxito de ABBA Voyage ha demostrado que el público está cada vez más dispuesto a abrazar estas experiencias.
La empresa detrás de dicho éxito, Pophouse, también ha adquirido los catálogos y derechos asociados a la banda de rock KISS, y se encuentra desarrollando una banda de avatares para ellos, que se lanzará en 2027. Esta diversificación de su cartera de artistas sugiere que la empresa está apostando fuerte por el fenómeno de los conciertos de holograma.
Uno de los aspectos clave en torno a los conciertos de holograma es la compleja red de derechos de propiedad intelectual involucrada. En el caso de Elvis Presley, varios actores importantes tienen un papel crucial:
Authentic Brands Group (ABG)
ABG, que se asoció con Universal Music en 2021, posee los derechos sobre el nombre, la imagen y la semejanza de Elvis Presley. Esta empresa de gestión de marcas desempeñará un papel fundamental en cualquier acuerdo relacionado con la resurrección digital del Rey del Rock and Roll.
Sony Music
Por otro lado, Sony Music, que recientemente ha estado explorando la adquisición de los derechos del catálogo de la banda Queen por más de mil millones de dólares, ostenta los derechos sobre la obra musical de Elvis Presley. Esto significa que cualquier acuerdo para los conciertos de holograma tendría que incluir a Sony Music como socio clave.
Pophouse Entertainment
Como la empresa detrás de ABBA Voyage, Pophouse Entertainment se posiciona como un actor clave en estas negociaciones. Su experiencia en la creación de espectáculos holográficos de alto nivel y su deseo declarado de "ver al joven Elvis revivir" lo convierten en un socio estratégico para llevar a cabo este proyecto.
Los derechos involucrados en el uso de hologramas.
La creación y explotación de hologramas de artistas fallecidos involucra una serie de derechos de propiedad intelectual. A saber:
1- Derechos de imagen y de interpretación.
Uno de los aspectos más críticos en la creación de hologramas de artistas es el manejo de los derechos de imagen y de interpretación. Para recrear la imagen de Elvis, es necesario obtener los permisos correspondientes de los herederos o entidades que poseen estos derechos. Este proceso puede ser complejo y requiere de negociaciones detalladas para asegurar que todas las partes involucradas reciban una compensación justa.
2- Derechos de autor y licencias musicales.
Además de los derechos de imagen, es fundamental gestionar los derechos de autor y las licencias musicales. Las canciones interpretadas por el holograma de Elvis están protegidas por derechos de autor, y cualquier uso de estas obras requiere la obtención de licencias adecuadas. Esto incluye tanto las grabaciones originales como cualquier arreglo o interpretación que se utilice en el espectáculo.
3- Protección de la tecnología holográfica.
La tecnología utilizada para crear hologramas también está sujeta a protección intelectual. Las patentes, secretos comerciales y otros derechos relacionados con la tecnología holográfica deben ser gestionados cuidadosamente para evitar infracciones y proteger las inversiones realizadas en el desarrollo de estas tecnologías.
4- Derechos de marca.
Elvis Presley es una de las figuras más icónicas de la música: su nombre y apariencia son reconocidos a nivel mundial. Las marcas relacionadas con Elvis Presley incluyen no solo su nombre, sino también sus logotipos asociados, y otros elementos distintivos que forman parte de su identidad comercial. Para producir y presentar el espectáculo de hologramas, los organizadores deben obtener permisos de los titulares de los derechos de marca.
Oportunidades y desafíos en la gestión de activos.
La gestión de activos de propiedad intelectual en el contexto de los hologramas ofrece numerosas oportunidades:
1-Nuevas fuentes de ingresos.
Los conciertos de holograma ofrecen nuevas oportunidades de ingresos para las empresas y los titulares de derechos. La posibilidad de resucitar digitalmente a artistas fallecidos abre la puerta a una fuente de ingresos recurrente y lucrativa tanto para los herederos de los artistas como para las empresas tecnológicas involucradas.
2-Expansión de mercados.
La tecnología holográfica permite llevar a artistas a lugares donde nunca se presentaron en vida. Esto abre la puerta a nuevos mercados y audiencias, ampliando el alcance de la música y la imagen de los artistas fallecidos.
3-Innovación y desarrollo tecnológico.
El desarrollo de hologramas impulsa la innovación y el avance tecnológico. Las inversiones en investigación y desarrollo en esta área pueden resultar en nuevas aplicaciones y tecnologías que beneficien a diversas industrias más allá del entretenimiento.
También es importante señalar que los conciertos de holograma de artistas fallecidos plantean cuestiones éticas. Algunos expertos han expresado preocupaciones sobre la autenticidad y la sensibilidad de estas experiencias, así como sobre la posible explotación de la imagen y la herencia de los artistas.
Sin dudas, la gestión de activos en el contexto de los hologramas, representa una fascinante intersección entre la tecnología y la propiedad intelectual. A medida que la tecnología continúa avanzando, es crucial continuar profundizando por los desafíos legales y aprovechar las oportunidades