El informe de Luminate revela un panorama desafiante para la mayoría de los artistas en las plataformas de streaming. A pesar del crecimiento en la cantidad total de streams a nivel global, un alarmante 87% de las nuevas canciones no superaron los 1,000 streams necesarios para comenzar a generar ingresos según los criterios establecidos por plataformas como Spotify. En dicho contexto, ¿Qué alternativa existe?
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El informe de Luminate de 2024 revela un panorama desafiante y contradictorio para la mayoría de los artistas en las plataformas de streaming. Por un lado, el streaming global creció un impresionante 17.3%, alcanzando los 4.8 billones de reproducciones. Esto marca un avance significativo en el consumo de música a través de plataformas digitales. El incremento se debe a la expansión de los mercados emergentes y al aumento de los suscriptores premium. Factores como la mejor accesibilidad a internet, la diversificación de ofertas de suscripción y una mayor integración de la música en aplicaciones y redes sociales han contribuido a este fenómeno. Este crecimiento no solo refleja una mayor aceptación del streaming como medio principal para el consumo de música, sino también una evolución en los hábitos de los oyentes a nivel mundial. Sin embargo esto no se traduce en un reparto mas equitativo de los ingresos sino más bien todo lo contrario: un alarmante 87% de las canciones nuevas en plataformas digitales no lograron superar los 1,000 streams. Este umbral, recientemente ajustado por plataformas como Spotify, determina el inicio de la generación de ingresos, dejando a una vasta mayoría de artistas sin la posibilidad de monetizar su trabajo.
Este dato resalta la saturación del mercado y la necesidad urgente de que los artistas adopten estrategias más dirigidas. Ahora bien, somos conscientes que no existe una única solución al problema de la sobresaturación y fragmentación del sector independiente ante una industria musical mainstream cada vez más concentrada. La situación se agrava al considerar que la mitad de estas pistas ni siquiera alcanza los 10 streams, sugiriendo que numerosos artistas no solo luchan por ser rentables, sino también por ser escuchados.
El contexto actual muestra que la brecha entre la producción musical y su rentabilidad es amplia. Mientras tanto, los artistas que logran superar el umbral de los 1,000 streams representan solo una pequeña fracción del total, destacando la competitividad extrema del espacio digital.
Antes de que te deprimas por completo con estos datos, vamos a pensar alternativas: Ante un mercado altamente saturado, la clave podría radicar en cultivar y nutrir a los superfans. Según el informe de Luminate, estos superfans no solo consumen más música, sino que también invierten significativamente en conciertos y productos físicos, gastando hasta un 66% más en eventos en vivo y un 105% más en mercancía que el oyente promedio.
Además, los superfans tienden a promocionar a sus artistas favoritos con amigos y familiares. Esto puedo ser muy beneficioso para aumentar la visibilidad y rentabilidad de nuevos artistas. Sin dudas, este enfoque ofrece una estrategia vital para destacarse en un entorno digital abarrotado.
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